Mis 18

Hoy miro aquel diario, donde día a día y año a año he guardado todos mis recuerdos. Y hoy he podido encontrar la llave que me  faltaba para poder abrir ese diario y mirarlo. Cuando lo he abierto me he dado de cuenta de que ya no me quedaban hojas para escribir, ya que las había gastado en llantos y lamentos inútiles, pero también me he dado de cuenta de que he aprendido a superar muchos miedos y a darme cuenta de los errores que he cometido y poderlos arreglar, también me he dado de cuenta de que cometí muchos fallos y que aun no he podido arreglarlos, pero aun así me queda tiempo ya que tengo, más llaves para abrir más diarios y poder escribir otros 18 años más de mi vida.

Pensando me he dado de cuenta que echo mucho de menos mis cumpleaños de cuando era una enana: su piñata, sus tartas: de payaso, mariposa y oso… sus árboles de chuches y sus fotos con mil y una cara y con abrazos inolvidables. (Ningún cumpleaños era repetibles, cada año era diferente). Eso poco a poco se fue acabando.